Boletín Nº 226
20-05-2013
Las manifestaciones dañan fuertemente el desarrollo de la vida ciudadana en Madrid
Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno en Madrid, dio una interesante charla en la que abordó las causas de los graves problemas que afronta actualmente la sociedad española y que tienen su reflejo en la proliferación de manifestaciones y otros actos reivindicativos.
Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno de Madrid,
en el desayuno informativo de Europa Press
celebrado el pasado lunes 13 de mayo en
el Hotel Inter Continental
La Constitución reconoce “el derecho de reunión pacífica y sin armas” y que “su ejercicio no necesita autorización previa”. “Cuando tenga lugar en lugares de tránsito público, se debe dar comunicación previa a la autoridad, que sólo podrá prohibirlos cuando existan razones fundadas de alteración del orden público, con peligro para personas y bienes”. En 2012 Madrid alcanzó la cifra récord de 3.419 manifestaciones con un incremento del 74% respecto a 2011, con una media de 6 al día. Hasta el 1 de mayo de 2013 se han celebrado 1.628 manifestaciones, más del doble que en igual periodo de 2012 en que hubo 791.
Aparte de que en transcurren casi siempre por las mismas calles y plazas de la ciudad, perjudican gravemente tanto a los intereses de hoteles, restaurantes y comercios en general, como a todos los ciudadanos y millones de turistas que visitan la capital durante todo el año. La capital es una ciudad segura como lo acreditan las estadísticas del ministerio del Interior que recoge un descenso de las infracciones penales del 2,8% durante el primer trimestre del año.
Pero otra cosa es la sensación de inseguridad que perciben los propios ciudadanos y los visitantes de Madrid. La seguridad es fundamental a la hora de adjudicar la celebración de un gran evento como las Olimpiadas; es economía porque de ella depende que las empresas de servicios (transportes, financieros, etc) puedan funcionar adecuadamente; es imagen de marca, ya que la existencia de reiterados incidentes en forma de contenedores incendiados, barricadas en las calles o mobiliario urbano destruido, además de enfrentamientos violentos con las fuerzas de seguridad, alcanzan un eco inmediato en los medios internacionales y causan un grave perjuicio a la confianza en nuestro país; es empleo y calidad de vida.
“Alcanzar los máximos niveles de libertad y derechos sociales constituye un objetivo irrenunciable en el que deben prevalecer los intereses de España. Para alcanzar esta meta –Gobierno, oposición y movimientos sociales- deben sumar esfuerzos porque todos somos España”. Con estas palabras finalizó Cristina Cifuentes en el desayuno informativo organizado por Europapress al que asistieron algunos ministros, autoridades, políticos, representantes de diversas instituciones, empresarios y medios de comunicación.
JAFC
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