Boletín Nº 179

El Aeropuerto Federico García Lorca (FGL) Granada-Jaén ha cumplido 40 años. Cuatro décadas desde que se constatara la necesidad de construir un aeropuerto capaz de absorber la pujanza del transporte aéreo en una provincia que, por aquella época, asistía a un verdadero boom de la aviación deportiva y al creciente establecimiento de rutas comerciales con ciudades españolas y marroquíes.

Ambas circunstancias, unidas a la irrupción en el mercado de aeronaves cada vez más sofisticadas, sirvieron de acicate para el proyecto y la posterior construcción del Aeropuerto de Granada, que sustituiría al primitivo aeródromo de Armilla y que el 19 de junio de 2006 adoptaría la denominación de Aeropuerto Federico García Lorca (FGL) Granada-Jaén.

Las obras arrancaron en 1970, y el 15 de junio de 1972 empezaron a funcionar las nuevas instalaciones, tras acometer una inversión cercana a los 200 millones de pesetas. Ubicadas entre los términos municipales de Chauchina y Santa Fe, acogieron su primer vuelo comercial a las 16.05 horas de la jornada inaugural. Era un Caravelle de la compañía Iberia, que partió de Madrid con 60 pasajeros a bordo, y que haría el viaje de vuelta a las 16.54 horas del mismo día, con 40 viajeros.

Durante el primer año completo con el nuevo aeródromo operativo, se registraron 2.502 vuelos y 48.440 pasajeros. La evolución experimentada por la demanda desde entonces, y la propia transformación del sector aeronáutico, se han traducido en numerosas mejoras para el aeropuerto. La primera de ellas, y una de las más ambiciosas, se produjo entre 1993 y 1994, con motivo del Mundial de Esquí de 1995 en Sierra Nevada.

El desarrollo vivido por el tráfico aéreo en la primera década del siglo XXI ha requerido la ejecución de nuevas actuaciones, con un importante desembolso, que ha rondado los 63 millones de euros entre 2000 y 2011. En cuanto al tráfico, su comportamiento ha sido bastante positivo desde 2000, al pasar de los 509.442 pasajeros contabilizados al cierre de ese ejercicio, a los 872.762 de 2011. En ese plazo de tiempo no sólo se ha dado un salto en número de viajeros, sino que también se ha internacionalizado la programación (en febrero de 2005 se estableció el primer vuelo regular con el extranjero, y tenía como destino el aeropuerto londinense de Stansted).

Desde Aena Aeropuertos se han duplicado los esfuerzos por impulsar la captación de tráfico, ya no sólo a través de unas infraestructuras y un servicio de calidad, sino también mediante la colaboración con las instituciones locales encargadas de la promoción turística y de negocios, la aplicación de tarifas atractivas o la realización de estudios de mercado para detectar rutas con potencial comercial.

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