Boletín Nº 101

La presión del sector turístico uno de los mas perjudicados con el plante de los controladores, ha sido la clave para ello ante el temor de una caída de las reservas hechas para Navidad por una posible repetición del hecho y con el fin de asegurar la normalidad en los aeropuertos.

Frente a 180 votos a favor de la prórroga y 131 abstenciones, sólo hubo nueve en contra que argumentaron que dicha declaración era otra cortina de humo que utiliza el Gobierno para que los ciudadanos olviden de la grave crisis económica y el paro galopante, además de no cumplirse los requisitos que exigen la Constitución y la ley aplicable.

La defensa de la prórroga, a pesar de la presencia inesperada de Zapatero que permaneció inmóvil en su escaño sin intervenir, la realizó el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui mediante una corta intervención destacable por su pobreza argumental y tan sólo por el riesgo de un rebrote de los paros de los controladores.

Este era muy remoto pues pocas horas antes los controladores en rueda de prensa y por escrito presentado en la Cámara refrendado por el 90 % del colectivo, se comprometían formalmente a cumplir con sus obligaciones hasta el 15 de enero, por lo que no había ninguna necesidad de prórroga, situación tan excepcional que jamás tenía prevista la Constitución para ser aplicada a resolver un conflicto laboral. Tal situación ha contado, además, con la fuerte oposición y crítica de prestigiosos representantes del mundo académico y judicial que han denunciado la anticonstitucionalidad de la medida.

JAFC

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